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Todos llegamos a Cristo heridos... busca tu sanidad...

Todos llegamos a Cristo heridos... busca tu sanidad...

Al entrar al cristianismo venimos de alguna u otra manera, heridos; heridos por traumas, por perjuicios, por cosas q nos ocasionaron, o tal vez el divorcio de nuestros padres, tal vez el exceso de violencia en el hogar, eh tal vez abuso sexual cuando eras pequeño, tal vez traumas o problemas o gritos o sombrerazos de tu casa. Pero de una u otra forma todos los seres humanos, porque no hay 1 solo ser humano que no haya sido herido. La Biblia es clara al decir que todos necesitamos comenzar a someternos a la obediencia de la palabra de Dios para comenzar y poder ser sanados interiormente. La vida Cristiana es una vida que la expresa de una forma maravillosa el Salmo 23 y aquí el salmista decía el señor restaura mi alma y esta palabra hebrea lo mismo que la palabra griega restaurar significa: "Cambiar interiormente". No es hasta que venimos nosotros al señor Jesucristo y hasta que nos acercamos a Dios que comenzamos a experimentar gradualmente cambios interiores; El señor Jesucristo en Mat. 5: 43 en adelante explico claramente que era muy importante las actitudes nuestras y nuestras actitudes hacia nuestros semejantes que nos rodean tienen que ver con nuestra salud emocional y mental y también física. Actualmente los doctores descubren cada día mas respecto ala grande relación que existe entre una persona amargada o alguien que odia a los problemas de las ulceras, los problemas de la alta presión, problemas cardiovasculares están íntimamente relacionados con al actitud mental que nosotros tenemos y presentamos hacia la vida principalmente a nuestros semejantes. El señor Jesucristo que es el hijo de Dios tenia mucha razón y razones profundas para decir lo que les dijo a los hombres de su época en este pasaje del sermón del monte y dice en Mat. cap 5 versículo del 43 en adelante: Oísteis que fue dicho: “Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo”. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os odian y orad por los que os ultrajan y os persiguen,, para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos y llover sobre justos e injustos. Si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto. Jesucristo aquí en este pasaje nos esta diciendo a todos nosotros que la actitud que tengamos hacia las personas que nos han hecho algún daño o un mal en la vida, tiene que ser una actitud que manifieste siempre, siempre perdón, una de las cosas que mas daño han hecho a la raza humana ha sido el odio y vemos a un hombre como Adolfo Hitler x ejemplo que fue un niño huérfano desde pequeño, creció con odios, este odio con l cual creció porque nadie según el en su autobiografía era capaz de brindarle ese amor, descargo todo este odio contra toda la humanidad y esta es a característica principal del odio y del rencor. Que el rencor y el odio tienen que ser descargados contra mis semejantes de alguna u otra manera lo haces contra tu hijo o contra tu esposo o contra tu esposa o contra tu hermano o contra tu amigo, porque si Dios no se encarga de corregir esta actitud tan negativa nosotros vamos a sufrir grandemente. Vamos a comenzar a analizar algunos de los orígenes de algunas de nuestras heridas emocionales, algunos de los orígenes o de donde puede provenir el que tu estés en esta hora con sentimientos de inseguridad de temor, complejo de inferioridad de aislamiento de timidez de rencor de odio y todas estas manifestaciones que tienen siempre una causa, tienen siempre una raíz y hasta que no encontremos esa raíz no podremos comenzar acrecer de una forma sana espiritualmente.

“Examíname OH Dios y conoce mi corazón, pruébame y conoce mis pensamientos…”

 

 

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